Gaztelugatxe es una joya escondida en la costa del País Vasco, que captura la esencia de la naturaleza, la historia y la mitología del norte de España. Este islote, coronado por la ermita de San Juan de Gaztelugatxe, ofrece una de las vistas más impresionantes del Golfo de Vizcaya, conectado a tierra firme por un puente de piedra y un camino zigzagueante de 241 escalones.
La historia de Gaztelugatxe es tan profunda y misteriosa como las aguas que lo rodean. Se cree que la ermita fue construida en el siglo X, y desde entonces, ha sido un lugar de peregrinación y refugio. Los visitantes a menudo tocan la campana de la ermita tres veces para pedir un deseo o para alejar los malos espíritus, según cuenta la tradición local.
“Gaztelugatxe no es solo un lugar de belleza natural, sino un puente hacia la historia y las leyendas del País Vasco”, refleja la conexión especial entre este lugar y la cultura vasca. Más allá de su significado religioso, Gaztelugatxe ha sido un protagonista en la cultura popular, inspirando a artistas y siendo escenario de películas y series, lo que ha aumentado su fama mundial.
El acceso a Gaztelugatxe implica una caminata por un estrecho camino que serpentea entre la naturaleza salvaje del País Vasco. La subida puede ser desafiante, pero las vistas panorámicas del mar Cantábrico y de la costa vasca que ofrece son incomparables. Este viaje no solo es físico sino también espiritual, ofreciendo un momento de reflexión y conexión con la naturaleza.
La biodiversidad en y alrededor de Gaztelugatxe es notable, con varias especies de aves marinas que anidan en los acantilados. La flora, adaptada a resistir el viento y la salinidad, añade otro elemento a la rica tapestry ecológica del área.
Para quienes planean visitar, es recomendable llevar calzado cómodo, agua y cámara para capturar la belleza del lugar. Además, visitar durante la primavera o el otoño puede ser ideal para evitar las multitudes del verano y disfrutar de un clima más templado.